Vivencias de un gay

sábado, 26 de septiembre de 2015

114. Lujuria en la oficina


El sábado por la noche tuve una reunión en la empresa Newpro con sus dos socios fundadores. «Newpro» es el nombre elegido por los niños, quiere decir «nuevos profesionales» y que ya tiene las oficinas prácticamente montadas.

sábado, 19 de septiembre de 2015

113. Confesiones en el parque


El sábado había quedado con Paquito para ir al cine a ver la película de las 50 sombras de Grey (pretenciosa película erótica que se queda en una tontería apta para monjitas mojigatas) y, precisamente ese día en que no pensé en los niños, ambos me llamaron. Y los dos querían verme.
Con Ángel la conversación fue banal y casi como un favor me sugirió la posibilidad de tener sexo. Fui cortante con él. Reconozco que tuve que hacer un gran esfuerzo para serlo, motu proprio no me sale; no estoy enfadado con él, aunque tampoco suspiro por verlo. No necesité mentirle: la cita con Paquito era anterior a su llamada y, ante su sorpresa, no cambié mi plan.

sábado, 12 de septiembre de 2015

112. Juegos en el ancensor


A las cuatro ya estaba en mi casa esperando la llegada de Ángel. Tenía preparado mi discurso lleno de reproches por todo lo malo que, en mi opinión, está haciendo últimamente. Pero quince minutos después sonó mi teléfono.

sábado, 5 de septiembre de 2015

111. Oportuna depresión


Estoy ya de los líos de Ángel hasta las narices. Lo que me está pasando parece por lo menos inaudito. Son unas intrigas adolescentes a las que debo poner fin. Yo creo que ni cuando era joven tenía estos follones; o yo era muy simple o estos chavales de ahora son demasiado listos.